MANO VACANTEDespués de leerlos, uno se queda preguntándose si la vanidad, en un creador, no será un indicio de impostura artística.
La mano del pintor —su mano viva—
no puede ser ligera o minuciosa,
apresar, perseguir, ni puede ociosa,
dibujar sin razón, ni ser activa,
ni sabia, ni brutal, ni pensativa,
ni artesana, ni loca, ni ambiciosa,
ni puede ser sutil ni artificiosa;
la mano del pintor —la decisiva—
ha de ser una mano que se abstiene
—no muda, ni neutral, ni acobardada—,
una mano, vacante, de testigo,
intensa, temblorosa, que se aviene
a quedar extendida, entrecerrada:
una mano desnuda, de mendigo.
jueves, 12 de octubre de 2006
Acorde
La delicada copla de AnaCó me recordó este soneto del pintor Ramón Gaya, que estoy seguro que ella no conoce. La coincidencia final me hizo aún más bonitos ambos poemas, pues no valoro yo tanto la originalidad como el acorde y el acierto, cuando se producen. Escribió Gaya:
Es la mano de Dios.
ResponderEliminarEl arte es la puerta del ser humano a lo sagrado, y cuanto más nos envilecemos más se refleja en la expresión artística de la época.
Puede que Dios haya muerto - no lo se- pero desde luego siguen existiendo cosas sagradas, que están por encima de la propia vida. A bote pronto se me ocurren varias, pero la libertad está siempre entre ellas. La inocencia de mis hijos pequeños también. Por eso yo postulo que la estética se escinda de la filosofía y se estudie como rama independiente de la teología, o mejor, la teología como parte de la estética.
Memorable soneto, gracias.
Muy bonitos los dos, la copla y el poema. ¡La humildad del artista!
ResponderEliminarEl soneto está bastante logrado pero a mi me marea la larguísima enumeración. Supongo que es cuestión de leerlo bastantes veces.
ResponderEliminarImpresionante poema, una vez más. Eso sí que vale para un "Manual de infractores", y no otras cosas que yo me sé.
ResponderEliminarEfectivamente, no conocía el soneto de Gaya, pero me ha gustado mucho el poema. Qué misterio, la creación artística. Muchas gracias por el link y la buena compañía.
ResponderEliminarHola ¡¡
ResponderEliminarSoy de Murcia, y acabo de descubrir este perfil. Yo también soy gran admirador de Ramón Gaya, Hace poco realice una composición musical sobre este soneto.
Podeis oirla en mi perfil
www.rapsodiaparacristal.blogspot.com
Espero que os guste,
Un saludo