Escribir en un periódico-diario tiene sus servidumbres o, mejor dicho, sus exigencias, que asumo, como ZP su despedida, con ánimo deportivo. Tratar de llevarle el paso a la actualidad es una. El anuncio de Zapatero me cogió con el pie cambiado, pero cambie de planes y eché el balón fuera. Después de enviado, me lamenté por no haber escrito algo más humorístico o algo más crítico. Esta mañana, sin embargo, me he levantado con el pie derecho, y creo que, siendo un artículo indeterminado, es
la despedida que se merece el hombre. O la mejor que yo le puedo dar. Vale.
Aciertas de lleno con el tono del artículo. El inimputable protagonista merece justo algo así.
ResponderEliminarPor cierto, en una escapada a Valladolid he podido sacar del cuarto de mi hermana "Chesterton, mi amigo", y me lo he leído a prisa para dejarlo en su sitio sin que la presunta lectora se enfade. Qué vibrante resulta la descripción de la puesta en marcha del Eye Witness y demás artilugios periodísticos. Supongo, no lo sé, que ahora no hay nada parecido.
Gracias, José Luis.
ResponderEliminarPara mí que el Eye Witness son los blogs.