Una tormenta de ideas con algún rompimiento de gloria
jueves, 7 de junio de 2012
Now I am in a holiday humour
En la reseña, me recreo poco en Rosalinda, pero no hace falta decir la admiración que me produce una chic capaz de verso tan claro: "A traveler! By my faith, you have a great reason to be sad".
Perdona, querido amigo, se ve que estoy en un humor festivo y puse el trampolínk antes de que llenaran la piscina. Ahora ya han publicado en Ambos mundos la reseña. Te agradezco el interés, porque siempre es de agradecer en general y, en particular, porque estoy muy satisfecho (con perdón) del artículo. Ojalá te guste.
Ignacio, cuando quieras te resumo yo al flamante Príncipe de Asturias, al que he leído mucho, no entiendo por qué. Lo único bueno es su cuento "La conversión de los judíos"
Yo también me apunto a la lista de espera. Venía a decirte, Ignacio, que a Roth lo tengo por leer, y veo que me va a bastar con un cuento. Qué bien.
Y de esto tengo que hablar pronto: de la ansiedad que podemos producir los críticos a los lectores, del deber de "quitar" tantos libros o muchos más de los que se recomiendan.
Me encantaría leerla, pero no veo enlace, y en Ambos mundos tampoco la encuentro; ¿en qué "mundo" está? ;) Un abrazo, y ya me dices.
ResponderEliminarPerdona, querido amigo, se ve que estoy en un humor festivo y puse el trampolínk antes de que llenaran la piscina. Ahora ya han publicado en Ambos mundos la reseña. Te agradezco el interés, porque siempre es de agradecer en general y, en particular, porque estoy muy satisfecho (con perdón) del artículo. Ojalá te guste.
ResponderEliminarA mí me ha encantado... Estoy con "El mercader de Venecia", tras "La doma de la furia", y ya sé por dónde continuar...
ResponderEliminarGracias. Pues para que no parezca que soy yo el que te pone tarea a ti nada más, empiezo con La doma de la furia.
ResponderEliminarSupongo que te interesará esto
ResponderEliminarMuchas gracias, Ángel. Me ha interesado (y lo seguirá haciendo) una barbaridad.
ResponderEliminarAbrazo grande,
E.
Ojú, qué de cosas sin leer. Y ahora el Príncipe de Asturias del que nada he leído. Mi ignorancia crece por días...
ResponderEliminarEstás orgulloso del artículo y con razón ¡Qué buen análisis del personaje y, por ende, de la obra!
ResponderEliminarIgnacio, cuando quieras te resumo yo al flamante Príncipe de Asturias, al que he leído mucho, no entiendo por qué.
ResponderEliminarLo único bueno es su cuento "La conversión de los judíos"
Vale, lo espero...
ResponderEliminarYo también me apunto a la lista de espera. Venía a decirte, Ignacio, que a Roth lo tengo por leer, y veo que me va a bastar con un cuento. Qué bien.
ResponderEliminarY de esto tengo que hablar pronto: de la ansiedad que podemos producir los críticos a los lectores, del deber de "quitar" tantos libros o muchos más de los que se recomiendan.
http://narrativanorteamericanacontemporanea.blogspot.com.es/2011/02/la-conversion-de-los-judios-de-philip.html
ResponderEliminaraquí lo podéis leer. El resto de su obra va de profesores que pillan con alumnas y compañeras.
Muchas gracias, Balaverde, lo leeré. También a Enrique, gracias a ambos ya tengo menos "ansiedad".
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