Una tormenta de ideas con algún rompimiento de gloria
lunes, 19 de noviembre de 2012
Reza el refrán
"A quien madruga, Dios le ayuda", y a quien no madruga también, pero el que madruga lo sabe y se lo dice, y, aunque sólo fuera eso, compensa el madrugón.
Buf, buf... con toda la sabiduría que emana del refranero español, este pareado siempre me pareció obra de un sádico.
ResponderEliminarSádico, el despertador. Torturadores, los horarios laborales. El refrán, dulce consuelo.
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