Con bastante guasa por parte de sus profesoras, a Quique, en la fiesta de fin de curso, le ha tocado ir de... pitufo poeta.
Al disfraz propuesto se me ha ocurrido añadirle un pergamino con estos versos:
Volverán las azules golondrinas
en Infantil con vuelos a jugar,
pero nuestras —creciendo— pitufinas
a Primaria se irán...
para siempre jamás.
Espero que las profesoras no lo consideren demasiado elegíaco para nuestros pequeños. (Quiero colarles la melancolía de matute.) Y sé que Bécquer me lo perdonará... por lo que tiene de defensa (de contraataque) del oficio.
Qué bueno Enrique!
ResponderEliminarEs geniaaaaal
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