El fuego
Con los rescoldos de anoche, enciendo la chimenea de esta madrugada. Hay una hermosa imagen de la tradición ahí, y un ahorro en cerillas, en pastillas de encendido y en piñas.
Pero eso ya lo sabía. Lo mejor es que en la casa oscura y silenciosa, el fuego en la habitación de al lado suena como uno de los niños que se ha levantado antes de tiempo y da pasos tímidos, tropezones, somnolientos, descalzos y tibios aún de la cama.
Tiene usted un poema ahí. ¡Escríbalo!
ResponderEliminarEs un poema, talmente
ResponderEliminar