miércoles, 6 de octubre de 2010

Estradísticas

El interés del artículo es relativo. A mí lo que me interesa más que nada es esta idea, idea o confesión, que he metido un poco con calzador:
El hábito de las estadísticas nos empobrece incluso moralmente. Ante un mal ajeno, tan acostumbrados como nos tienen a pensar en tantos por ciento, sufrimos la tentación mezquina de alegrarnos porque tenemos ya menos probabilidades de sufrirlo nosotros. Es una egoísta evolución posmoderna del instinto de supervivencia.

3 comentarios:

  1. Un calzador que se agradece.

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  2. Anónimo1:28 p. m.

    Al margen de estadísticas, he oído decir sobre nuestra actitud frente al mal ajeno que siempre hay algo en él que no nos disgusta del todo. Es tremendo.
    Jilguero.

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  3. A mi me ha emocionado eso de que la filosofía tuvo un repentino ataque de modestia y quiso ser una ciencia y la humanidad ha tenido un acceso de humildad y se ha conformado con ser un número.
    Desgarrador

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