Una tormenta de ideas con algún rompimiento de gloria
Que el observador no se convierta en francotirador.
Y que sean puntos de partida, no de llegada.Jilguero.
O tal vez, ¿cerrados?
Que bueno, por cierto.
Que el observador no se convierta en francotirador.
ResponderEliminarY que sean puntos de partida, no de llegada.
ResponderEliminarJilguero.
O tal vez, ¿cerrados?
ResponderEliminarQue bueno, por cierto.
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