Una tormenta de ideas con algún rompimiento de gloria
Muy bueno, Enrique. El haiku como calendario de lo fugaz y de lo que retorna. Aquí y ahora... y en carnaval.
Me gusta. Me gustan esos relámpagos de plata y azul. (La luna en las nubes riela...). Bravo, ¡Rayos y truenos!
Que bonito.
¡Esto sí que es un haiku en toda regla!
A mí me gusta mucho también, aunque esté mal decirlo. Por eso os agradezco tanto los cuatro comentarios.
Me acordaré de ti no sólo en el cajero automático (ssta operación no tiene comisión), también al ver la luz quebrada de la Luna.
Muy bueno, Enrique. El haiku como calendario de lo fugaz y de lo que retorna. Aquí y ahora... y en carnaval.
ResponderEliminarMe gusta. Me gustan esos relámpagos de plata y azul. (La luna en las nubes riela...). Bravo, ¡Rayos y truenos!
ResponderEliminarQue bonito.
ResponderEliminar¡Esto sí que es un haiku en toda regla!
ResponderEliminarA mí me gusta mucho también, aunque esté mal decirlo. Por eso os agradezco tanto los cuatro comentarios.
ResponderEliminarMe acordaré de ti no sólo en el cajero automático (ssta operación no tiene comisión), también al ver la luz quebrada de la Luna.
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