Me gusta tanto la lluvia que desde pequeño estoy llorando el desperdicio de la lluvia, tan dulce, sobre el mar, tan grande, tan hondo, tan salado, tan indiferente. He dado un paso más y esta noche he
lamentado la lluvia en la oscuridad, sin que puede verse su plata vieja
oscureciendo, matizando y ahondando los verdes del jardín.
La lluvia de noche es una tinta china. (Y eso me ha consolado.)
Se dice que las cuatro cosas más inútiles del mundo son:
ResponderEliminar-Los pechos en el hombre,
-la lluvia en el mar,
-la Luna de día,
-y la Junta de Andalucía.