La cita es larga pero perfecta. Lo que no es perfecto es mi afán de emulación, porque no lo necesito. A mí no me visitan los escritores ni los artistas jóvenes, ni me envían nada. De manera que lo que le envidio a JRJ no es la soledad —que ya la tengo, por su gusto y el mío—, sino el jesto torero de dar un portazo como el que pega media verónica.Si yo pudiera haría un viaje indefinido a América del Norte, país donde me encuentro tan a gusto, para darme cuenta de la verdadera dimensión de España y para, perdido lo pequeño, amarla más. Esto no me es ahora posible, y voy a hacer el viaje idealmente recojiéndome, apartándome, aislándome en casi todo.
Ruego, pues, a los escritores y artistas jóvenes que me distinguen con su frecuencia, que no lo tomen a menosprecio, que me consideren ausente, que si les interesa mi trabajo, inventen correspondencias más profundas y sutiles que la visita y la carta innecesaria. Yo compro siempre los libros que me interesan o me gustan. De modo que tampoco se consideren obligados a enviarme sus cosas; que nuestra relación quede reducida y ampliada a nuestra obra objetivada. La mejor amistad estuvo siempre sustentada por la ausencia o la muerte.
Tampoco me hace falta, para amar más a España, irme a América.
En fin, que estoy mejor que quiero.
Arregla el "jesto" torero antes que lo lean tus alumnos.
ResponderEliminarMí jeneroso anónimo, muchas gracias, pero si es de JRJ será jesto, ¿no?
ResponderEliminar...recojiéndome, apartándome, aislándome en casi todo... qué ganas, hasta sin América del Norte.
ResponderEliminarLa cosa está en el "casi".
Un abrazo y esto para el viaje:
http://marianmus.wordpress.com/2007/02/08/los-adioses/
Lo mejor: el jesto juanramoniano. Lo peor: que ya no me consideren poeta joven (o a lo mejor los envíos por iméil ya no cuentan)
ResponderEliminarY aunque tarde, muchas gracias por el texto tuyo y de JRJ.
ResponderEliminarBeades, recuerda: Vetus melius est. Y además los amigos nos dan compañía sin quitarnos la soledad, que ahí está el "casi" esencial que vio CB.
ResponderEliminarTampoco es cierto que nadie le envíe nada, Enrique, por cierto, enhorabuena por su artículo sobre la nobleza de espíritu.
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