Jan Twardowski lo tiene claro:
Mi impresión es que la lírica religiosa debe asemejarse a la poesía de carácter erótico […] La lírica religiosa, al igual que sucede con la amorosa, debe estar llena de admiración, de anhelo, de inquietud, de tristeza, de desesperación; tiene que ser capaz de tocar toda la escala de las emociones más genuinas.
Y yo digo:
Amén. Pero me confirma luego, y me hace gracia, ver una coincidencia suya casi literal con el último libro de Abelardo Linares, titulado significativamente
Y ningún otro cielo. Es un poemario rabiosamente amoroso y, en ciertos momentos, se asemeja a la poesía de carácter místico. La coincidencia que digo es entre un verso de Abelardo en el poema “Oración”, que reza:
tu sonrisa que quita los pecados del mundo.
y éste de Twardowski:
¡Sonrisa del Cordero de Dios, ten piedad de nosotros!
Claro que enseguida se nota que Abelardo Linares está hablando sólo de una mujer, como en esta soleá, que nos arranca otra sonrisa, más de autocompasión:
Tú no quieres que te quiera
ni que deje de quererte,
sino que yo te comprenda.
Todo está en el Cantar de los cantares. Pero si se pierde la referencia divina, qué fácil es que se pierda lo humano.
ResponderEliminarAsí es, MF. Me resultó curioso, sin embargo, ver que tanto Twardowski como Langlois citan como referencia esencial al rey David. Supongo que es por la amplitud de temas, por el autobiografismo de fondo y por cierto rechazo a la alegoría.
ResponderEliminarEl Rey David, no lo había pensado. Muy interesante.
ResponderEliminarPor cierto, el libro de Langlois habría que reeditarlo, es una vacuna de sentido común literario.
Simone Weil (y dale...)sostenía que los místicos son los únicos que utilizan el lenguaje amoroso con propiedad y que el resto lo toma prestado.
ResponderEliminarLa lírica amorosa sería lírica religiosa vuelta a lo humano.
Qué maravillosa cita de Weil. Cuánto la usaré a partir de ahora. ¿Recuerdas de qué libro es?
ResponderEliminarQuerido JM, ¿a qué libro de Ibáñez Langlois te refieres? Yo los reeditaría todos, por eso te pregunto. Supongo que te refieres a su ensayo sobre Rilke, Pound y Neruda, ¿no?
Es de Attente de Dieu. Te la localizo en cuanto pueda y te la paso en franchute.
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