Uno de los padres preguntó: "Y este señor, ¿cómo sabe tanto de mujeres?". Me pareció una pregunta pertinente. Naturalmente, la he oído muchas veces, pero sólo ahora vi la respuesta correcta, quizá porque quedaba claro que el cura saber, sabía; y porque se hacía en el contexto perfecto: en un foro de padres.
Es el viejo tema del árbol y del bosque. Nosotros no sabemos tanto porque nuestro árbol no nos deja ver el bosque. El celibato es un monte desde el que se ve el panorama completo, sin interferencias. Aunque para redondear la metáfora, no es un árbol lo nuestro, sino un rosal, espinoso y florido. Nuestro papel es ver lo único que es. Normal que el bosque lo vean mejor otros.
2 comentarios:
Hola Enrique,
puede ser que el celibato le proporcione a este hombre una perspectiva diferente a la del hombre casado pero creo que en realidad le proporciona tiempo libre para ver vídeos en youtube y disfrutar del humor de Mark Gungor.
Algunos de sus vídeos son muy divertidos, te los recomiendo:
http://www.youtube.com/watch?v=Nlcs0IlZR4Y
Un saludo
¿Tiempo libre al célibe?, ja, ja, ja, hay gente que necesita echar una mirada a su alrededor, salir de su ombligo.
En fin.
Muy gracioso este sacerdote.
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