martes, 5 de febrero de 2008

Fortis imaginatio generat casum

Dios mío, ¿y qué hago ahora con mi hipocondría?

3 comentarios:

Carlos RM dijo...

Cuídala como si fuera una enferma...

Anónimo dijo...

Algo parecido a cuando a mí me coge fiebre -veáse, en versión leve, los dos días anteriores- y me esfuerzo en pensar para que continúe (eso sí, sin agravarse) para seguir por casa con los mimos de mis padres.

Anónimo dijo...

jajajaja...

nunca me había puesto a pensar la frase desde la perspectiva de un hipocondriaco.



saludos cordiales