domingo, 13 de marzo de 2011

De ida y vuelta

Cumpliendo mi palabra cenicienta del miércoles de ídem, hoy hablo de política. En la redacción del Diario se han comido todos los puntos y aparte.

A Carmen los puntos y las comas se le quedan en nada. Prefiere comerse entera la pequeña selección de artículos menos políticos que me publica Siltolá. Están --parece que dice-- para comérselos.

Pero es publicidad engañosa, os desengaño, porque 1) ella no es objetiva y 2), como Plinio el Joven, piensa que no hay libro que no tenga algo bueno. Le hinca el diente a todos.

20 comentarios:

María dijo...

Enhorabuena por ambos.
Quiero pensar que te quedarán pocos artículos contra zp como tal. Y desechable es no sólo el envase sino todo su contenido. Puro desecho.

marinero dijo...

Un argumento definitivo contra el libro electrónico: a ver quién le hinca el diente. No hay color, digo, no hay sabor.

E. G-Máiquez dijo...

Gracias, Marinero. Por el argumento definitivo y por los que polémicos que pasas por alto, elegantemente, al menos por ahora.

Las gracias a María son constantes.

Y un tercer visitante, muy atento, en todos los sentidos, ha detectado que la foto era en un hospital. Efectivamente. Estábamos de visita, pero nada grave. Y no porque los heridos son de la familia política, sino porque están muy bien. Gracias, gracias por el interés.

marinero dijo...

Supongo que el comentario de Enrique se refiere a su artículo; la verdad es que no lo había leído. No estoy de acuerdo en muchas de las cosas que dice; me sigue pareciendo que tiene una visión de la política dividida en buenos (los "suyos", claro) y "malos" (los otros), visión que es falsa porque la realidad tiene muchísimos más matices, que en mi opinión él tiende a pasar por alto. Incluso cayendo, como lo hacía en su artículo "Mayor, más grande", en la defensa a ultranza de una postura como la de Mayor Oreja de sostener a todo trance que el Gobierno negocia permamentemente con ETA, falacia desautorizada por cargos de su propio partido, por los hechos (detenciones de cargos de primer nivel en ETA, en una cantidad como quizá nunca se había visto), y por lo que haga falta. No tengo, ni nadie razonable puede tener, ninguna duda de que esos mismos hechos, sin cambiarles una coma, serían interpretados por EGM de un modo radicalmente opuesto si fuera el PP quien gobernase. Pero ya sé que pensamos diferente. Cuando intervengo, no lo hago tanto para exponer mis propias ideas o criticar las ajenas (creo que la pluralidad de opiniones es buena y necesaria) como para señalar lo que me parecen actitudes intolerantes o irredentamente partidistas. Yo, como dicen de Aristóteles, me considero más amigo de la verdad (o de lo que yo honestamente entiendo por tal) que de ninguna confesión política. O religiosa, o lo que sea.

E. G-Máiquez dijo...

Gracias por recordarme el artículo sobre Mayor, Marinero. Un peligro del comentarista político es olvidarse incluso de lo que él dijo cuando los hechos pierden actualidad. Le aseguro que me desdeciré si queda claro que no hubo negociación con ETA. Pero habrá que esperar, sin embargo, a que se aclare el caso Faisán, si deja el ministro del interior.

marinero dijo...

Repito a EGM lo que le decía en mi nota anterior: la manera de evitar partidismos excesivos es preguntarse, cuando uno tiene una idea sobre estos temas, si los mismos hechos, producidos en el partido contrario, le llevarían a la misma conclusión. Porque, si no es así, uno no está dando una opinión fundada en ellos, sino en los pre-juicios que tiene sobre el asunto. Desconozco la solución que pueda tener el "caso Faisán". Sí sé que los hechos ocurridos en los últimos tiempos, y a los que me refería en mi nota anterior, no creo que puedan llevar a otra conclusión razonable que la de que, en la actualidad, no existe negociación con ETA. ¿La hubo en aquel entonces? Yo no lo creo, pero podría dudarse; lo acepto. Pero Mayor Oreja, y EGM al apoyarle (en contra, repito, de cargos más sensatos del propio PP) afirmaron, contra toda evidencia, que la seguía habiendo. Eso es partidismo. Las detenciones de que hablaba ¿llevarían a EGM, si se produjeran con el PP en el poder, a la misma conclusión que ahora sostiene con respecto al PSOE? Si es así, explíquenos por qué piensa eso AHORA (o lo pensaba cuando publicó aquel artículo), no por qué pudo pensarlo cuando ocurrió lo del "Faisán". Y por qué cree que Mayor Oreja, al sostenella y no enmendalla al respecto, se engrandecía. Porque a mí su actitud me recuerda una pancarta en su contra que vi hace ya años. Decía así: A MAYOR OREJA, MAYOR SORDERA. Esa sordera, o ceguera, partidista, es lo que me parece mal: con respecto al PSOE, al PP o a quien sea. Lo que encuentro sectario y criticable.

E. G-Máiquez dijo...

Mi partidismo a favor del PP es inexistente. Quizá para explicárselo tendría que hacerle un esquema de mi cosmovisión, pero no debería hacer falta con lo que nos conocemos. En cuanto a las detenciones, como todo el mundo sabe, no excluyen la negociación, que ha solido ir en paralelo. Por otra parte, mi viejo artículo y aún más las declaraciones de Mayor fueron anteriores o, en todo caso, contemporáneas al caso Faisán. Por tanto, espere usted a que vea el resultado del caso en cuestión para que me haga una composición de lugar definitiva, si no le importa.

marinero dijo...

Al descubrimiento del caso Faisán, creo; no al momento en que ocurrió. Por lo demás, lo de hasta qué punto "nos conocemos" es cosa que, me parece, podría discutirse. Yo no creo que se pueda conocer muy fácilmente a nadie; es más, creo que incluso las personas a las que mejor conozco tienen partes, repliegues y opiniones que pueden sorprenderme. Y no me parece mal; me parece lógico.

Respecto a si las detenciones ocurridas desde hace ya mucho tiempo podrían suceder en un paralelo razonable con presuntas conversaciones secretas, yo, sinceramente, no estoy de acuerdo. Y creo que, si el PP estuviese en el poder y fuesen ellos, por tanto, los presuntos negociadores, tampoco el propio EGM lo creería.

No quiero decir con ello que EGM sea seguidor del PP, extremo que desconozco y que me parece irrelevante en este asunto; sólo que el propio EGM se ha calificado a sí mismo de "conservador" en más de un texto que yo he leído; eso, y su simpatía por la posición sobre la que polemizamos de Mayor Oreja, pienso que autorizan mi suposición. Que, por otra parte, estoy muy dispuesto a rectificar: yo sé bien las muchísimas veces que me equivoco.

Kris Kelvin dijo...

¡Ay, EGM y marinero!

¡Qué estropean una entrada tan bonita!

Un saludo afectuoso a los dos

E. G-Máiquez dijo...

Mis más sinceras disculpas, Kris.

marinero dijo...

Lo mihmo digo, oiga.

Kris Kelvin dijo...

Y disculpas por mi parte por patear la ortografía.

En qué estaría yo pensando para escribir ese "qué" que me delata...

Saludos

P.S. Por cierto, esta vez creo que ha empezado EGM que le puso la muleta a marinero.

marinero dijo...

No, amigo "Kris"; EGM sólo fue amable conmigo. Fui yo el que "empezó", si es que eso significa algo. No importa; yo creo que, en el fondo, EGM y yo nos caemos bien, y que nuestras peleas épicas terminan en reconciliaciones no menos sentidas. Al menos, ésa es la impresión que yo tengo. Y que me alegra tener.

marinero dijo...

En resumen: EGM y yo acabaremos por matarnos a besos.

Juan Ignacio dijo...

¿Dice "De ida y vuelta" o "Vuelta y vuelta"?

E. G-Máiquez dijo...

No sería equitativo eso de matarnos a besos, Marinero. A mí me esperaría el paraíso de Dante, mejorado, además. Y usted no sé lo que espera, aunque me temo que no se hace demasiadas ilusiones. Esperemos, pues, a estar en igualdad de condiciones.

E. G-Máiquez dijo...

Son expresiones distintas, Juan Ignacio. "Vuelta y vuelta" viene a ser culinaria, con permiso de San Lorenzo. Y "De ida y vuelta" hace referencia precisamente al arte que fue de España a HIspanoamérica y volvió con un toque de allá. También a determinadas canciones y palos del flamenco. En el caso de mi libro, son artículos que fueron al papel, pasaron por el blogg, y ahora vuelven al papel.

marinero dijo...

Hombre, amigo EGM, lo de matarse tampoco hay que entenderlo literalmente, Dios me libre. Y, respeto al futuro post-mortem, si no lo hay vamos a estar igual; y si lo hay, supongo que a cada uno le será dado según le corresponda por sus méritos, independientemente de la fe que haya podido profesar. Yo quiero suponer que antes entrará en el cielo un agnóstico, o incluso un ateo, que hayan sido buenas personas, que un creyente que haya sido todo lo contrario.

Juan Ignacio dijo...

¡Precisamente pensé que decía "vuelta y vuelta" porque se lo estaba comiendo...!

Pero me alegro de saber ahora por qué se llama así tu libro.

Anónimo dijo...

Veo a Carmen graciosísima pero una indigestión de libro, ahora que estoy muy sensibilizado (en carne propia) con los niños, no sería conveniente.
Un fuerte abrazo
Hugo