sábado, 11 de noviembre de 2006

Bomba va

Hoy pensaba enlazar con mi reseña sobre los haikus en Poesía Digital, pero lo dejaremos para mañana. Y enlazaré con Poesía Digital el adelanto de mi prólogo sobre Ibáñez Langlois. ¿El motivo del cambio de planes? Que Ignacio, la voz crítica más culta y ponderada de este blogg, también la más valiente, porque hay algún usuario anónimo que no tira mal, pero, como lo hace con máscara, cuesta cogerle cariño, Ignacio, decía, me preguntaba en los comentarios de ayer qué pensaba de mi tiempo, que a él le entusiasma. Y aunque la famosa cita de Ortega no está mal, yo prefiero este fragmento dogmático de Ibáñez, con el que estoy tan identificado que puede servir de respuesta mía. ¡Bomba va!:
[…]
pero este hombre dirán este cristiano
este hombre no es amante de su tiempo
sólo sabe escupir al siglo XX
tiempo mío
o tempora o mores
tiempo mío mi amor
yo no te escupiré pues tú eres yo
los tiempos dijo Agustín somos nosotros
mi amado siglo XX
no eres bueno pero eres mi persona
una mierda serás pero eres yo
eres todos mis ego uno por uno
eres todos los cristos mis hermanos
I love you 20th century sincerely
I am crazy about you my dearest time
oui je t'aime dans la joie ou la douleur
ti voglio tanto bene o tempo o sole mio
si quieres te declaro en sánscrito mi amor
en esdrújulo adorote mi tempora
en estructuralista si lo entiendes mejor
lo cual es para mí la peor humillación
[…]

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Este Ibáñez... ¿es el de Mortadelo?

Muy honrado por los piropos y la atención, alterar los planes del blogg (nunca le he preguntado por qué lo llama así) por un comentario mío no es pequeña deferencia.

Ahora bien, eso de valiente... no sabía que fueran usted y sus contertulios gente de temer. ;-))

Corríjame, por otro lado, lo del entusiasmo. Creo simplemente que es el mejor de los tiempos (y me reprimo de añadir el eufónico y dickensiano contrapunto), pero dada la competencia no es decir gran cosa.

No veo la tan traída y llevada deshumanización por ninguna parte: y no es que encuentre a mi alrededor tantísima humanidad y contenido y valores; es más bien que me parece una inmensa fantasía edulcorada eso de suponer, gratuitamente, a partir de los libros y obras de los grandes hombres, que en los siglos pasados todas las almas eran ricas y complejas.

Paréceme a mí que la gente, el común de la gente siempre ha sido igual, más o menos adocenada y torpe, con destellos maravillosos muy de cuando en cuando. Y todo eso de la alienación del consumismo y las almas muertas me suena a hueco. ¿No estaban alienados los siervos de la gleba o los mineros de carbón del XIX? Me gustaría que les pudiéramos preguntar por sus vivencias espirituales, seguramente nos mandarían al carajo con razón.

Juan Ignacio dijo...

Después de todo, ya estamos en "la plenitud de los tiempos"...

Ángel Ruiz dijo...

Ayer vi en poesiadigital el adelanto y la portada; iba a enlazarlo, pero me lo evito con lo que pones hoy.
Me gusta el título del libro: Oficio, suficientemente polisémico. 'Oficio' es una palabra con muchos sentidos, creo que todos positivos, además.
Quizá en poesiadigital.es podrían remitir a un lugar más fácil de obtener el libro, porque la Fundación de Cultura Andaluza (paso por alto el nombre, ejem) no remite a nada, salvo a un e-mail. ¿Lo tendrán en Renacimento cuando salga?
Si alguien de fuera de Andalucía (rejem) quiere comprarlo ¿qué puede hacer?

Juan Ignacio dijo...

Juego con palabras:

Ignacio, valiente -> Ignacio Valente -> Ibañez Langlois... ¡!

Dispénsame por jugar en público (y que me dispense Ignacio).

E. G-Máiquez dijo...
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E. G-Máiquez dijo...

Hay que ver, don Ignacio, después de llamarle ponderado y todo, va usted y le suelta a Langlois el chiste de Ibáñez y Mortadelo. Menos mal que está el consolador precedente de Borges y Forges, que tanta gracia hace a los lectores de El País.
Cuando el libro salga a finales de mes, haré todo lo posible para que lo tengan en Renacimiento y para que, de un modo u otro, salte por encima de Despeñaperros. Gracias por el interés.
Y juega, Juan Ignacio, con las palabras y las coincidencias, tú que sabes.

Juan Ignacio dijo...

¿Sabes que Ibañez Langlois parece ser otro de tus "amigos" que "conoce" a Marechal? Así dice en el prólogo a "El banquete de Severo Arcángelo" de las Obras Completas del argentino:

Su mensaje, luego de más de treinta años desde su publicación, se revela actualísimo y de urgente aplicación, como si el tiempo hubiese trabajado a su favor. Graciela Coulson, Ignacio Valente (José María [sic] Ibañez Langlois), Edmundo García Caffarena, Jorge Antonio Foti, Graciela Maturo, Rolando Camozzi Barrios, entre otros críticos y exégetas, han valorado los distintos aspectos de esta obra singular...

E. G-Máiquez dijo...

Nada, que en cuanto pase este mes de noviembre, que me trae muerto, me pongo a leer a Marechal. Seguro.

Anónimo dijo...

Vaya por dios... me había leído el post sin fijarme mucho, y no me di cuenta de que el Ibáñez del poema salía aludido al principio con sus dos apellidos.

Lo que se me quedó fue, pues, que mejor que la frase de Ortega un poema de Ibáñez, y me hizo gracia, yo el único Ibáñez que doy por supuesto sin más datos es el dibujante.

En fin, demasiada aclaración para tan poca cosa... como también será el caso ahora, cuando te explique que me voy al usted sin pensarlo, por costumbre inveterada del foro en que escribo desde hace años.

Jesús Beades dijo...

¡Cómo lo vamos a pasar con "Oficio"!!