sábado, 14 de julio de 2018

Oh, O'Gorman



Un buen amigo, Paco Soler, me manda esta maravilla. 
Mervyn O'Gorman fue un ingeniero eléctrico y aeronáutico británico, en los tiempos en los que comenzaban a construirse los primeros aviones. Nació en 1871 y murió en 1958, y Santa Wikipedia se acuerda aún de él, aunque sólo en la versión inglesa: https://en.wikipedia.org/wiki/Mervyn_O%27Gorman

Muy curioso, y muy amigo de la innovaciones técnicas, a primeros de la década de 1910 se interesó por las primeras noticias que llegaban sobre exploraciones de fotografía en color. Y dedicó algunos de sus ratos de ocio a ejercitarse en esas técnicas que entonces casi nadie conocía.

Y así, allá por el verano de 1913, dedicó un buen día a acompañar a la familia de su amigo, el filósofo Edwyn Robert Bevan ( https://en.wikipedia.org/wiki/Edwyn_Bevan ), y a fotografiarla, prestando especial atención a una de sus hijas, llamada Christina.

Y el resultado de aquel día de verano fue este:
[Algunos no podéis ver las fotos en el blogg, ay la tecnología: en este enlace están.]












Después de esto, el buen ingeniero O'Gorman siguió con sus trabajos y sus técnicas. Dice además Santa Wikipedia, que «Sir Geoffrey de Havilland lo describe como "un hombre de gran encanto y humor, siempre interesante en la conversación"».

Más aún, en 1933 publicó incluso un libro de poemas, titulado "Verses Gloomy and Gay" del que tengo en mi biblioteca un ejemplar de la primera edición (supongo que no habría más) dedicado por el propio O'Gorman...

... pero de todas sus actividades, sus inquietudes, su proyectos y cálculos, sus ideas y humor, su carácter y su vida, lo único que ha quedado para el recuerdo, y la razón por la que se sigue hablando de él, y aparece en Santa Wikipedia, son esas fotografías que tomara un buen día de verano, en 1913, acompañando a la familia de su amigo filósofo...

Un sólo día en su vida. Un par de horas. Un par de miradas suyas en esas fotos... ¿no resulta todo esto bastante misterioso...?

Mervyn O'Gorman, el ingeniero de las maravillosas fotografías de aquel verano 1913, para copiar uno de los poemitas de su colección "Verses gloomy & gay", que editara en 1933 en Chelsea.

Es un librito muy breve. Once poemillas, no más... menos de veinte páginas... aunque eso sí: impresas con buen gusto en un papel grueso y muy agradable al tacto, que ha resistido 85 años sin perder su dignidad.

La mayor parte de los poemillas son divertimentos graciosos, en versos de muy pocas sílabas. De ritmo ágil. Uno puede entender a qué se refería Sir Geoffrey de Havilland cuando describió a O'Gorman como «un hombre de gran encanto y humor, siempre interesante en la conversación». 

Pero hay un momento en esas páginas en el que O'Gorman se pone serio, y escribe esto:

Stones and crystals

Buried in dark abyss, covered in slime,
Reckless of seasons, heedless of time,
       The stones know God!
Infused by Him the germ of crystals rare,
Hidden within their rugged shapes, they bear
And patiently, withouth reproach or tears.
Perfect their fruit of symmetry... and years.

Far flung by shell, hurled from their rest,
Spluttered with blood accurst or blessed
      The stones know God.
No grief they feel, no fear, no love or hate
They work His will thy serve Him as they wait
Their purpose hidden, sleep would seem their doom
They live as dead, their symbol is the tomb.

Smashed by the seas, or worn by streams,
They raise no plaint, God moulds their dreams,
      The stones know God.
Carved for His Church or hewn to form a dome
Trodden by all, and crushed into the road
They bear man's burden, and they build his home,
Silent and helpful, they endure the load;
      The stones know God!

Que supongo que puede traducirse más o menos así:

Piedras y cristales

Enterradas en abismos oscuros, cubiertas de limo,
sin preocuparse de las estaciones, descuidadas del tiempo,
      ¡Las piedras conocen a Dios!
Infundido por Él, contienen el germen de los raros cristales,
Oculto dentro de sus formas rugosas
Y pacientemente, sin reproche ni lágrimas
Perfeccionan su fruto de simetría ... y de años.

Lanzadas lejos como proyectiles, arrancadas de su descanso
salpicadas de sangre maldita o bendita
     Las piedras conocen a Dios.
No sienten pena, ni miedo, ni amor ni odio
Ellas hacen Su voluntad y le sirven a Él esperando
Su propósito oculto. El sueño parecería su destino
Pues viven como muertos, y su símbolo es la tumba.

Aplastadas por los mares, o desgastadas por las corrientes,
No levantan quejas. Dios moldea sus sueños.
     Las piedras conocen a Dios.
Talladas para Su Iglesia o labradas para formar una cúpula
Caminadas por todos, y pisadas en el camino
Ellas soportan el peso del hombre, y edifican su hogar,
Silenciosas y serviciales, sobrellevan la carga;
     ¡Las piedras conocen a Dios!

Claro está que estos versos no van a cambiar la historia de la poesía inglesa. Pero nos muestran que el respetado ingeniero aeronaútico O'Gorman, además de un técnico aficionado a manejar los nuevos descubrimientos, un agradable conversador, y un fotógrafo genial, que tuvo el privilegio de un día de verano arrebatador, poseía también una dimensión religiosa...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Aquí tenéis las fotos de "Christina in red":
http://culturainquieta.com/es/foto/item/6457-christina-in-red-fotografias-en-color-de-1913-por-mervyn-o-gorman.html