LEONOR: ¿Qué estás comiendo, Carmen? ¿Pepino?
CARMEN: Cebolla.
LEONOR: Es pepino.
CARMEN: Cebolla.
LEONOR: ¿Es que no sabes decir "pepino"?
CARMEN: Pe-pi-no, ¡pepino!
LEONOR: Ah, entonces, ¿qué estás comiendo?
CARMEN: Cebolla.
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10 comentarios:
Jajaja, qué bueno. Los niños nacen sabiendo demasiado. Quizá te sirva aplicar este método: http://www.youtube.com/watch?v=wsBon3DTwIY
jajaja, es genial
Lo que todavía nos estamos preguntando es de dónde sacó la palabra "cebolla" y por qué esa defensa cerrada.
Sí, porque es pequeña para entrar en la preadolescencia...
Claro que cada vez empieza antes (y termina después).
Que no, que no es llevar la contraria por llevarla, que es un modo de ver las cosas asociativo, o metafórico. Tú le lees cuentos y ella propende a la analogía.
Todo sea dicho, de paso, en defensa propia. Mi padre, por una historia parecida en la que, después de un pulso mirando los dibujos de un libro(él decía "caballo" y yo "vaca"), terminé diciéndole "caballo pero vaca", cada vez que, ya mayorcita, me ponía cerril me llamaba "Crista-caballo pero vaca" .
Era un caballo, pero gordo y paticorto, Carmencita-pepino pero cebolla tendrá sus razones.
Pues, a mí, este diálogo me recuerda al Principito y el dibujo que hace de la serpiente que se ha comido un elefante, pero parece un sombrero. Quizá haya algo se eso. BB
Divertidísimo. Pero déjame decirte que todavía quedan carros y carretas.
Por dar unos ánimos... preadolescencia, preadolescencia... ¡Pues no te quea ná
Genial la peque¡¡¡ Un crack, de los buenos
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