Yo me alivié a un pino verde
por ver si la divisaba,
y sólo divisé el polvo
del coche que la llevaba.
Anda jaleo, jaleo:
ya se acabó el alboroto
y vamos al tiroteo.
martes, 7 de noviembre de 2006
Anda jaleo
Por puro goce estético (versión esperpento) estoy entusiasmado con el segundo Tripartito, aunque para hacer honor (si la palabra no les ofende) a su nombre, deberían repetirlo una vez más, o sea, dar el tripartito salto mortal, con otros dos Estatuts y todo. Puede que en mi visión eufórica del espectáculo tenga algo que ver, amén de la ciclotimia, mi recién adquirido orgullo por la realiá nasioná: ver al cordobés Montilla de Molt Honorable enciende mi fervor y hasta mis ansias expansionistas. De aquí a unos años, será un fundamento histórico (de más fuste que otros) para pedir Cataluña como territorio de los paízeh béticoh. Montilla, para acomodarse a lo que viene, podría empezar por entonar un nuevo himno:
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3 comentarios:
Gracias por esta entrada, Enrique, de lúcida ironía amarga. Panorama esperpéntico, sin duda. Una no sabe si reir o llorar.
Pero he de confesarte que lo que no sé es si Montilla tendrá tiempo para aprenderse tan adecuado y hermoso himno. Ahora está en plan intensivo con lo de que se tiene que sacar el nivel C de catalán y anda tan fastidiado que ha prometido volver a examinar de lo mismo a todos los profesores, porque no se lo cree (¡ja!) que él sea el único que no sabe pronunciar la vocal neutra y todo eso "dels accents tancats i oberts". El pobre. Menos mal que tendremos al bueno de Josep (Carod) para mover los hilos y hacer los viajes y encuentros precisos mientras José (Montilla) se pone en serio con el català, los exámenes de nivel C, las multas, los carnés de "catalanidá" y lo que se tercie.
Ay, Cataluña y sus políticos, hay que reconocer que son ¡"chiripitifláuticos"!:
http://www.youtube.com/watch?v=0XKR2kbHm-o
No los superáis porque no os ponéis a ello. Lo de reivindicar Cataluña como país bético es factible y tiene un fundamento incuestionable. A ver si convencéis a Arenas.
Estoy con Inma, que además es de mi pueblo. Una de las regiones más extrañas de este país de charanga y pandereta es Cataluña. Una región preciosa, de montañas oscuras, calles de niebla y orillas saladas. Pero también de histeria, indiferencia y crispación. Mucha culpa la tienen los políticos (que ella llama con acierto "chiripitifláuticos"), pero también la sociedad esclava de lo Políticamente Correcto.
En esta hermosa y rara tierra, al contrario que el resto del mundo, "fascista" es la persona no nacionalista. Un ejemplo reciente: los que agredieron la semana pasada a un universitario (por llevar una camiseta de un partido no nacionalista) no son fascistas. El fascista es el chaval, que es más tonto que un ocho por llevar esa camiseta. Y le dieron bien. Por fascista.
Escribir esto desde el extranjero se hace duro... Antes de irme, algunos amigos me dijeron en broma que me exiliaba, pero no quiero creer que eso sea cierto. Al final, reluce como el oro el humor del genial JOSEP PLÀ:
"El nacionalismo es como un pedo. Sólo le gusta al que se lo tira."
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