sábado, 6 de diciembre de 2008

Hecho inquietante

Cuando estoy muy cansado no puedo leer, pero sí escribir.

10 comentarios:

Lucía dijo...

No se sabe si estás muy cansado y por eso escribes o como escribes tan poco si no lo estás,je,je.

E. G-Máiquez dijo...

Tienes razón, sagaz Boo, no se sabe. No se te va una, eh.

Néstor dijo...

¿Cansado o harto?

Embajador dijo...

No eres el único.

Se llama narcisismo.

Ya sabes que el pecado habitualmente (subrayo el habitualmente) cuesta menos trabajo.

jazz dijo...

o interesante. tu blog igual

E. G-Máiquez dijo...

Joe, embajador, muy diplomático no estás.

Y no digo que no tengas un muy inquietante fondo de razón. A mí antes de tu comentario, lo que me inquietaba era pensar que leer me supone más trabajo que escribir, o sea, que escribir para mí era algo más superficial. Ahora ya estoy en un mar de dudas... Lo que te agradezco mucho, por supuesto.

Adaldrida dijo...

pues yo te conozco y sé que el embajador aquí no ha hilado tan fino como se piensa. A lo mejor el narcisista es él. Tú sólo tienes el punto de vanidad que queda simpático en los poetas, cuando lo reconocen como tú.
Cuánta sencillez la tuya.

E. G-Máiquez dijo...

Quizá como no me conoce, Ro, no he engañado tanto al embajador. Muy agradecido.

Embajador dijo...

Perdona Enrique, mi comentario anterior quería ser simplemente una broma y.......no me salió.

E. G-Máiquez dijo...

Que sí te salió. Lo que pasa es que las buenas bromas tienen que tener su lado, precisamente, inquietante. Yo te la agradezco mucho de verdad.