Tenía prevista otra entrada, pero puede esperar. Había estado fuera, con mi padre y mis hijos, de compras. Cuando por fin llegamos a casa, mi padre le preguntó a Leonor qué tal había echado ese ratito de paz que había tenido. Contestó: "Muy bien. He leído Un paso atrás, así que he estado charlando tranquilamente con Quique". Y yo no dije nada, conmovido, pero, si nos fijamos bien, qué inmejorable crítica literaria y, además, qué bonito detalle conyugal. Da gusto acabar así el año. Comprenderán ustedes que haya dejado para otro año la entrada prevista, ¿no?
lunes, 31 de diciembre de 2012
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4 comentarios:
¡Precioso!
También el lector, en parte, define el género de una obra literaria.
¡Plas, plas, plas! qué suerte que le lean así a uno.
Y doy fe, leer este librito delicioso es como charlar un ratito con su autor...
Muy feliz 2013
Muy bien aprovechado ese ratito de paz!
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