Dije que no comentaría más aquí pero alguien pidió disculpas, de modo que heme de nuevo en este lar (que es como lugar pero en cursi).
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Leí su entrada sobre el insomnio y las horas perdidas. En realidad no es así. Muchas personas quieren vencer al insomnio oyendo la radio o pensando cosas. Hacen mal. En realidad el cerebro también descansa con el silencio y la oscuridad. Cuando tenga insomnio procure no pensar en nada ni oír la radio ni ninguna actividad mental. Piense sólo que, con el silencio y la oscuridad, su cerebro también está descansando. No es lo mismo que el sueño, pero también sirve para descansar y recuperar energía. Además es muy posible que, al desaparecer la sensación de que "estoy perdiendo mi tiempo, tan necesario para otras cosas", se distienda y el sueño haga su aparición.
Maravilla que a esas edades los niños sigan lo que les dicta la lógica acerca de la mecánica del lenguaje, que no sabemos cómo consiguen adquirir, antes que lo que oyen a los mayores. Jilguero.
Y descubro, gracias a tu comentario Jilguero, que alguna paradoja pedagógica se encierra en que lo que aprendamos por lógica sea irregular y que la Tradición venga después a corregirlo.
Para mí es un misterio que haya verbos irregulares. Y existen en casi todos los idiomas. Mi hija, cuando tenía tres años, decía "se ha rompido" en vez de "se ha roto". Cuando yo la corregía, sentía que estaba atentando contra la lógica humana.
A veces, cuando hablo, me sale "andé" en vez de "anduve". (No se lo digáis a nadie.) Mi cerebro también reivindica la lógica.
Es evidente, y supongo que estará perfectamente estudiado, que algunas irregularidades de los verbos están sujetas a norma (por ejemplo, pedir y medir en los tiempos de presente). Y creo recordar que en el griego clásico, en que sólo hay una conjugación, el verbo lío, los verbos irregulares obedecen a unas reglas muy precisas.
Lo de anduve es un horror. Una vez corrigieron a mi novia que había dicho "andé", con eso de "anduuuve"', y ella respondió "a mí el verbo anduvir no me gusta"
A mí tampoco me gusta corregirles esos "fallos", Enrique, y a veces me remuerde la consciencia pensar que por qué a mí me haga gracia hablen incorrectamente. Pero me tranquilizas, tienes toda la razón, ya aprenderán en el cole.
8 comentarios:
Un niño pregunta a otro:
-¿Cómo se dice: no sabo o no sepo?
Y el otro responde:
-No sé.
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Dije que no comentaría más aquí pero alguien pidió disculpas, de modo que heme de nuevo en este lar (que es como lugar pero en cursi).
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Leí su entrada sobre el insomnio y las horas perdidas. En realidad no es así. Muchas personas quieren vencer al insomnio oyendo la radio o pensando cosas. Hacen mal. En realidad el cerebro también descansa con el silencio y la oscuridad. Cuando tenga insomnio procure no pensar en nada ni oír la radio ni ninguna actividad mental. Piense sólo que, con el silencio y la oscuridad, su cerebro también está descansando. No es lo mismo que el sueño, pero también sirve para descansar y recuperar energía. Además es muy posible que, al desaparecer la sensación de que "estoy perdiendo mi tiempo, tan necesario para otras cosas", se distienda y el sueño haga su aparición.
Maravilla que a esas edades los niños sigan lo que les dicta la lógica acerca de la mecánica del lenguaje, que no sabemos cómo consiguen adquirir, antes que lo que oyen a los mayores.
Jilguero.
Gracias por haber volvido, Zumo.
Y descubro, gracias a tu comentario Jilguero, que alguna paradoja pedagógica se encierra en que lo que aprendamos por lógica sea irregular y que la Tradición venga después a corregirlo.
Para mí es un misterio que haya verbos irregulares. Y existen en casi todos los idiomas. Mi hija, cuando tenía tres años, decía "se ha rompido" en vez de "se ha roto". Cuando yo la corregía, sentía que estaba atentando contra la lógica humana.
A veces, cuando hablo, me sale "andé" en vez de "anduve". (No se lo digáis a nadie.) Mi cerebro también reivindica la lógica.
Es evidente, y supongo que estará perfectamente estudiado, que algunas irregularidades de los verbos están sujetas a norma (por ejemplo, pedir y medir en los tiempos de presente). Y creo recordar que en el griego clásico, en que sólo hay una conjugación, el verbo lío, los verbos irregulares obedecen a unas reglas muy precisas.
A veces, Zumo, el "rompido" tiene su gracia. Recuérdo el verso de Góngora "rompida el agua en las menudas piedras...".
Jilguero.
Lo de anduve es un horror. Una vez corrigieron a mi novia que había dicho "andé", con eso de "anduuuve"', y ella respondió "a mí el verbo anduvir no me gusta"
A mí tampoco me gusta corregirles esos "fallos", Enrique, y a veces me remuerde la consciencia pensar que por qué a mí me haga gracia hablen incorrectamente. Pero me tranquilizas, tienes toda la razón, ya aprenderán en el cole.
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