jueves, 16 de febrero de 2012

Qué casualidad, leñe

Por razones que mis inteligentes lectores deducirán sin problemas se me ha despertado un repentino interés por los cuentos infantiles. Consulto enseguida Bienvenidos a la fiesta, naturalmente. Y entro corriendo en internet en busca del libro de Mem Fox donde se cuenta esta espléndida anécdota: 
Dicen que una vez una mujer le preguntó a Einstein qué hacer para que sus hijos fueran más inteligentes y Einstein le respondió: «Léales cuentos de hadas». La mujer, riéndose, le replicó: «Ya, ¿y qué debo hacer después de haberles leído cuentos de hadas?». Y Einstein le dijo: «Pues léales más cuentos de hadas».
En la primera página que visito, la de inicio de Agapea (libros urgentes) me encuentro con que el libro más vendido del mes de Febrero es... (Me temo que no será una colección de cuentos.)

Qué relatividad con Einsten, ¿no? Se me han puesto los pelos de punta.

6 comentarios:

Dolores dijo...

jajaja. Es bueno...

Anónimo dijo...

Y una vez que hayamos conseguido niños tan inteligentes como Einstein ¿qué hacemos?
Meg

Anónimo dijo...

La anécdota de Einstein me ha recordado lo que nos dice Ortega sobre el sistema educativo británico de la época del imperio. ¿Cómo preparaba la universidad a los jóvenes que habrían de administrar tamaños territorios? Pues muy sencillo: haciendo que aprendieran griego y se dedicaran al deporte.
(de esa forma no se encasillaban en unos determinados conocimientos y tenían la mente más libre y abierta para afrontar cualquier situación).
Jilguero

Cordelia dijo...

¡Horror! A mis niñas (4 y 2 años), les leo por las noches enjundiosos ensayos: la bella durmiente, blancanieves, los tres cerditos... Alí Babá les chifla (yo creo que porque no la han visto en la tele)

AFD dijo...

¡Genial!

E. G-Máiquez dijo...

Gracias a todos. Lo de Ortega-Jilguero lo usaré. Y buena pregunta la de Meg. En mi defensa diré que si buscaba así de urgentemente el libro de Mem Fox no era porque tuviese especial preocupación por la inteligencia de Carmen, que va bien, sino porque se titula Leer como por arte de magia: cómo enseñar a tu hijo a leer en edad preescolar y otros milagros de la lectura en voz alta. Luego pasó lo de la página de Agapea y ya se me olvidó la lectura por arte de magia,etc.